La patología en el periodonto se caracteriza por estar en continua evolución, pasando por diferentes fases de la enfermedad.

Cuando una enfermedad periodontal comienza, afecta únicamente a la encía, causando un proceso inflamatorio reversible, denominado GINGIVITIS. Si esta gingivitis se mantiene en el tiempo y además se dan otros factores (genéticos, ambientales, locales…), la enfermedad periodontal evoluciona a lo que se conoce como. Aquí, además de inflamación en la encía, la enfermedad cursa con destrucción de tejidos periodontales: hueso, cemento y ligamento periodontal. Cuando comienza la PERIODONTITIS, la destrucción del tejido es irreversible.